101 KMS. DE SOLIDARIDAD , COMPAÑERISMO Y DESAFIO.
¡TOMARES VINCI! ¡HISPALIS VINCI! ¡ROMA VINCI!
Ojalá todas las batallas pudieran dirimirse “jugando a correr”…
Quiero empezar agradeciendo a Los Pretorianos de Tomares que no pudieron cruzar la línea de meta (7 de nuestros mejores hombres) que gracias a ellos cambié totalmente mi planteamiento de carrera para intentar disfrutar y compartir al máximo con ellos todas las emociones y sensaciones que sólo “LA MADRE DE TODAS LAS CARRERAS” nos puede dar.
Aún tengo en la memoria la cara de satisfacción de niño pequeño que se le quedó a Manolo (tijeras) después de nuestro “desfile” del viernes, vestidos de romanos, por la Alameda, mientras todo el mundo nos pedía hacerse una foto a nuestro lado.
Además nuestro apoyo masivo a la iniciativa a favor de la Asociación Española Contra el Cáncer hizo también que esta X edición de los 101 tuviera una connotación especial dónde queríamos contribuir a que fuese una fiesta del deporte y la solidaridad (PLUM y Abencio siempre estaré a vuestro lado)
Los momentos previos a la carrera, dentro del campo de fútbol, nos permitieron saludar a nuestros amigos cientouneros y seguir luciendo nuestros cascos romanos.
Los primeros 47 kms. hasta Torrealháquime fueron, a pesar del calor, según lo previsto, fui trotando la mayor parte del tiempo, salvo en las cuestas y aplicando metódicamente la ingestión de agua, bebida isotónica, geles con maltodrextina y los aminoácidos ramificados. ¡Bebo cuando no tengo sed!, ¡Pretorianos Contra el Cáncer x la Vida! Y ¡Todo está en la mente!, fueron 3 de las consignas más repetidas. Me acompañaban los amigos Polo y Alfonso.
Correr 101 kms.con el casco, la espada y el escudo de romano me resultaba muy divertido y creo que despertaba las simpatías de todo corredor y ciclista que me cruzaba.
El encuentro con Javi y sus malas sensaciones fue providencial porque hizo posible que todo lo que pasó después me permitiera disfrutar de unos 101, que aún siendo los más duros de los 4 que he finalizado, pudiese compartirlos muy cerca de quien está entre mis mejores amigos…
En mitad de la cuesta del infierno (Setenil), mientras le echo un poco de agua a Javi en la cabeza, empezamos a pensar en el planteamiento de la carrera decidiendo esperar en Setenil (km. 57), a Manuel (de Castilleja) para posteriormente esperar en el Cuartel (Km. 77,3) a nuestro Tribuno Justo y a sus inseparabables “Signifer” (Juan Carlos Moreno y Manolo Tijeras).
Por delante sabíamos que iban Fernando (Cornicem), Antonio y Sevi.
Polo y Manolito Alcora nos esperaban junto a Alfonso en el siguiente avituallamiento.
Ya conocíamos las bajas de Cañete y Rafa (de Castilleja). Por otra parte nuestra caballería atravesaba las líneas enemigas comandadas por el Bombero Pretoriano y por nuestro Antonio Lopera (atención a la calidad humana de este Pretoriano).
La entrada en Setenil mejoró el estado de ánimo de Javi y además me encontré con varios amigos del Club Atletismo San Pablo (Juan Luis, Elvira, Mª Angeles), que no participaban y fueron para animarnos.
Además me emocionó encontrarme con aquel niño de 9 años (se llama Raúl) cuya madre me pidió que si podía hacerme una foto con él dejándole el escudo y la espada.
Me entero del abandono de Juan Carlos ocultándoselo a Javi para intentar que llegase hasta el Cuartel y allí poder esperar a Justo y Manolo Tijera para “hacer piña” y afrontar todos juntos la subida a la ermita.
Sin parar de hablar por el móvil para conocer la situación del resto de compañeros todo mi afán era animarles a continuar para juntarnos todos en el Cuartel.
Quiero agradecer las llamadas desde Tomares de Ricardo y Rafa Jiménez preocupándose por la situación.
Por el camino me encuentro a mi buen amigo Lutgardo con problemas pero que luego pudo recuperarse y acabar la carrera ¡Enhorabuena Lutgar!.
Javi se retiraba en el km. 65 después de casi 20 kms. aguantando mi empecinamiento en que tenía que continuar, espero que sepas disculparme. Aunque ahora digas que no, sé que lo volverás a intentar el año que viene.
En ese momento me quedo con Manuel (de Castilleja) y empezamos a trotar para buscar la llegada al refugio cuando nos cae la noche y descubrimos que el nuevo trazado para llegar al Cuartel es una auténtica emboscada (más de 2 kms. con desniveles por encima del 40%, a oscuras, con piedras y tierra suelta al lado de una valla con pinchos en su parte superior).
Llegamos al refugio encontrándonos con Polo, Manolito Alcora (quien abandonaba por compromisos familiares) y Alfonso. Aprovechamos para comer y cambiarnos de ropa mientras esperamos a Justo y Manolo Tijeras cuando Juan Carlos me comunica por teléfono que no los esperemos porque acaban de abandonar en el km. 74, la verdad es que no puedo creerlo y le pido que me lo repita…
“…los que vieron la caida del Tribuno Justo cuentan que con 3 flechas en la espalda, con la rodilla en tierra pudo abatir a 2 enemigos más y antes de sucumbir ante varios guerreros germanos se le escuchó decir ¡Tomares Vinci!...”
“…junto a él, el enemigo se ensañó con Manolo Tijera a quien tuvieron que cortar las manos para quitar los estandartes de Los Pretorianos de Tomares…”
A partir de ese momento y sin ningún compañero al que esperar, situados en el km. 84 de carrera y una vez bajada la cuesta de la ermita, junto a Manolo (de Castilleja) me lanzo con rabia contenida a correr en el descenso de asfalto a unos 5 min. por km. gritando a cada corredor que me encuentro ¡Fuerza y Honor!, ¡Tomares Vinci!, levantando al cielo mi espada…
Sin dejar de correr y una vez contactado con Polo y Alfonso, al final de la cuesta del cachondeo encontramos también el apoyo del descendiente de Cornelio Balbo, nuestro amigo gaditano LIVAN, de la Linea, y los 5 en formación “Acies Triplex” arremetemos contra los Germanos de Ariovisto para recuperar nuestros estandartes y encontrar la victoria final cruzando la línea de meta…a las 5 de la madrugada.
Cuando uno empieza a sentir que las marcas, los tiempos, el puesto en la carrera…es algo secundario…que lo más importante es divertirse, fomentar el sentido de equipo, disfrutar de la amistad en carrera…es cuando se da cuenta que ha aprendido a “jugar a correr”…
Abrazo fuerte de Pretoriano.
José Luis Martín Pérez. Dorsal 105.
H+QNC (Hoy más que nunca cientounero)
CLUB MARATÓN TOMARES
CLUB ATLETISMO SAN PABLO
(HÍSPALIS)
Ojalá todas las batallas pudieran dirimirse “jugando a correr”…
Quiero empezar agradeciendo a Los Pretorianos de Tomares que no pudieron cruzar la línea de meta (7 de nuestros mejores hombres) que gracias a ellos cambié totalmente mi planteamiento de carrera para intentar disfrutar y compartir al máximo con ellos todas las emociones y sensaciones que sólo “LA MADRE DE TODAS LAS CARRERAS” nos puede dar.
Aún tengo en la memoria la cara de satisfacción de niño pequeño que se le quedó a Manolo (tijeras) después de nuestro “desfile” del viernes, vestidos de romanos, por la Alameda, mientras todo el mundo nos pedía hacerse una foto a nuestro lado.
Además nuestro apoyo masivo a la iniciativa a favor de la Asociación Española Contra el Cáncer hizo también que esta X edición de los 101 tuviera una connotación especial dónde queríamos contribuir a que fuese una fiesta del deporte y la solidaridad (PLUM y Abencio siempre estaré a vuestro lado)
Los momentos previos a la carrera, dentro del campo de fútbol, nos permitieron saludar a nuestros amigos cientouneros y seguir luciendo nuestros cascos romanos.
Los primeros 47 kms. hasta Torrealháquime fueron, a pesar del calor, según lo previsto, fui trotando la mayor parte del tiempo, salvo en las cuestas y aplicando metódicamente la ingestión de agua, bebida isotónica, geles con maltodrextina y los aminoácidos ramificados. ¡Bebo cuando no tengo sed!, ¡Pretorianos Contra el Cáncer x la Vida! Y ¡Todo está en la mente!, fueron 3 de las consignas más repetidas. Me acompañaban los amigos Polo y Alfonso.
Correr 101 kms.con el casco, la espada y el escudo de romano me resultaba muy divertido y creo que despertaba las simpatías de todo corredor y ciclista que me cruzaba.
El encuentro con Javi y sus malas sensaciones fue providencial porque hizo posible que todo lo que pasó después me permitiera disfrutar de unos 101, que aún siendo los más duros de los 4 que he finalizado, pudiese compartirlos muy cerca de quien está entre mis mejores amigos…
En mitad de la cuesta del infierno (Setenil), mientras le echo un poco de agua a Javi en la cabeza, empezamos a pensar en el planteamiento de la carrera decidiendo esperar en Setenil (km. 57), a Manuel (de Castilleja) para posteriormente esperar en el Cuartel (Km. 77,3) a nuestro Tribuno Justo y a sus inseparabables “Signifer” (Juan Carlos Moreno y Manolo Tijeras).
Por delante sabíamos que iban Fernando (Cornicem), Antonio y Sevi.
Polo y Manolito Alcora nos esperaban junto a Alfonso en el siguiente avituallamiento.
Ya conocíamos las bajas de Cañete y Rafa (de Castilleja). Por otra parte nuestra caballería atravesaba las líneas enemigas comandadas por el Bombero Pretoriano y por nuestro Antonio Lopera (atención a la calidad humana de este Pretoriano).
La entrada en Setenil mejoró el estado de ánimo de Javi y además me encontré con varios amigos del Club Atletismo San Pablo (Juan Luis, Elvira, Mª Angeles), que no participaban y fueron para animarnos.
Además me emocionó encontrarme con aquel niño de 9 años (se llama Raúl) cuya madre me pidió que si podía hacerme una foto con él dejándole el escudo y la espada.
Me entero del abandono de Juan Carlos ocultándoselo a Javi para intentar que llegase hasta el Cuartel y allí poder esperar a Justo y Manolo Tijera para “hacer piña” y afrontar todos juntos la subida a la ermita.
Sin parar de hablar por el móvil para conocer la situación del resto de compañeros todo mi afán era animarles a continuar para juntarnos todos en el Cuartel.
Quiero agradecer las llamadas desde Tomares de Ricardo y Rafa Jiménez preocupándose por la situación.
Por el camino me encuentro a mi buen amigo Lutgardo con problemas pero que luego pudo recuperarse y acabar la carrera ¡Enhorabuena Lutgar!.
Javi se retiraba en el km. 65 después de casi 20 kms. aguantando mi empecinamiento en que tenía que continuar, espero que sepas disculparme. Aunque ahora digas que no, sé que lo volverás a intentar el año que viene.
En ese momento me quedo con Manuel (de Castilleja) y empezamos a trotar para buscar la llegada al refugio cuando nos cae la noche y descubrimos que el nuevo trazado para llegar al Cuartel es una auténtica emboscada (más de 2 kms. con desniveles por encima del 40%, a oscuras, con piedras y tierra suelta al lado de una valla con pinchos en su parte superior).
Llegamos al refugio encontrándonos con Polo, Manolito Alcora (quien abandonaba por compromisos familiares) y Alfonso. Aprovechamos para comer y cambiarnos de ropa mientras esperamos a Justo y Manolo Tijeras cuando Juan Carlos me comunica por teléfono que no los esperemos porque acaban de abandonar en el km. 74, la verdad es que no puedo creerlo y le pido que me lo repita…
“…los que vieron la caida del Tribuno Justo cuentan que con 3 flechas en la espalda, con la rodilla en tierra pudo abatir a 2 enemigos más y antes de sucumbir ante varios guerreros germanos se le escuchó decir ¡Tomares Vinci!...”
“…junto a él, el enemigo se ensañó con Manolo Tijera a quien tuvieron que cortar las manos para quitar los estandartes de Los Pretorianos de Tomares…”
A partir de ese momento y sin ningún compañero al que esperar, situados en el km. 84 de carrera y una vez bajada la cuesta de la ermita, junto a Manolo (de Castilleja) me lanzo con rabia contenida a correr en el descenso de asfalto a unos 5 min. por km. gritando a cada corredor que me encuentro ¡Fuerza y Honor!, ¡Tomares Vinci!, levantando al cielo mi espada…
Sin dejar de correr y una vez contactado con Polo y Alfonso, al final de la cuesta del cachondeo encontramos también el apoyo del descendiente de Cornelio Balbo, nuestro amigo gaditano LIVAN, de la Linea, y los 5 en formación “Acies Triplex” arremetemos contra los Germanos de Ariovisto para recuperar nuestros estandartes y encontrar la victoria final cruzando la línea de meta…a las 5 de la madrugada.
Cuando uno empieza a sentir que las marcas, los tiempos, el puesto en la carrera…es algo secundario…que lo más importante es divertirse, fomentar el sentido de equipo, disfrutar de la amistad en carrera…es cuando se da cuenta que ha aprendido a “jugar a correr”…
Abrazo fuerte de Pretoriano.
José Luis Martín Pérez. Dorsal 105.
H+QNC (Hoy más que nunca cientounero)
CLUB MARATÓN TOMARES
CLUB ATLETISMO SAN PABLO
(HÍSPALIS)
posted by H+QNC at 2:31 p. m.
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